Hoy estreno la categoría de las bebidas espirituosas con un sabor que me encanta, el limón. Bueno, todos los cítricos me entusiasman: en comidas, postres, bebidas, perfumes...
Y digo, ¡por fin! porque aunque no os contaba nada, estos últimos 15 días he estado preparando lo que os traigo hoy (no penséis que es laborioso, es que necesita un tiempo de maceración).
Esta es la primera vez que hago un licor, pero cuando vi la receta del limoncello (un licor típico del sur de Italia) me pareció tan sencilla, que decidí hacer esta primera incursión. La receta la encontré en la web www.buscarecetas.com.ar.
Ingredientes:
1/2 l de aguardiente gallego de orujo
1/2 Kg de limones
750 ml agua mineral
400 g de azúcar
Preparación:
Este licor se elabora con la cáscara de los limones, por lo que lo ideal sería conseguir unos limones caseros o de máxima confianza, y en todo caso lavados con esmero (vamos a extraer los compuestos presentes en la cáscara del limón, así que cuantos menos añadidos mejor).
La parte más laboriosa de preparar este licor, es retirarle la piel muy finita, de manera que sólo nos quedemos con la parte amarilla de la monda. Si la cortamos gruesa, con partes blancas, el licor amargará.
NOTA sobre los limones:
Para hacer este licor se recomienda usar limones con la piel dura y gruesa, porque resultan más fáciles de manipular. Por este motivo no conviene que los limones se pasen de maduros, ya que a medida que van madurando su monda se va haciendo más fina y débil.
Se colocan las cáscaras de limón junto con el aguardiente en un recipiente de vidrio con tapa, y lo guardamos en un lugar fresco y en el que no le dé mucha luz. Maceramos las cáscaras en el aguardiente 15 días. Al cabo de este tiempo, el aguardiente debería tener un color amarillo transparente y las mondas deberían estar bastante pálidas.
Una vez transcurridos los 15 días, preparamos un almíbar con el agua y el azúcar, hirviéndo la mezcla unos 5 minutos mientras removemos con una cuchara de madera. Dejamos enfriar el almíbar, y cuando esté a temperatura ambiente lo mezclamos con el aguardiente macerado con los limones, del que habremos eliminado las cáscaras con un filtro. Envasamos el licor en botellas de vidrio con tapa. Podemos guardar una botellita en la nevera, ya que este licor se suele beber bien frío.
NOTA:
El proceso de maceración de la monda de limón en el aguardiente es lo que en química se denomina una extracción sólido-líquido, y en el que la finalidad es sacar una mezcla de compuestos presentes en la monda del limón, que es el sólido, a un líquido, el aguardiente. Los compuestos que pretendemos extraer son los aceites esenciales, mezclas de sustancias sintetizadas por las plantas responsables de su olor característico. El dato más importante es que estos compuestos son insolubles en agua y solubles en alcohol, y que se oxidan por exposición al aire. De ahí que en la maceración usemos sólo el aguardiente, y añadamos el almíbar tras la maceración y que se aconseje cerrar bien el recipiente en el que se realiza la maceración. El aguardiente de orujo suele tener un % de alcohol de entre el 40-50 % volumen. Si usamos un alcohol de menor porcentaje alcohólico, la extracción empeorará.
Resultados:
Os dejo aquí un par de fotos que tomó Dospixels de la bebida resultante. El color y el olor no dejan lugar a equivocaciones: es de limón. ¡El catador voluntario le dio un 10!
Conclusiones:
Un licor muy fácil de preparar, con un sabor refrescante y suave. ¿Quién pone el postre?
Tiene una pinta genial
ResponderEliminar¡Qué bonitas botellas y qué sugerente el color del licorcillo! No tengo inconveniente en poner el postre, pero ¿cuál sería el maridaje ideal? ¿un tiramisú para seguir a la italiana? ¿una rica bica blanca de Laza buscando el mestizaje? ¿o una contundente Sacher en claro guiño a Herr Kartoffel?
ResponderEliminarHola Eneko! Y además está muy bueno, es muy refrescante.
ResponderEliminarHola Rohito: pues ahora que lo dices, de todas las que propones se me antoja una bica blanca de Laza!
ResponderEliminarQueda de cine yo quieroooooo!!! besos.
ResponderEliminarViando la lista minimalista de los ingredientes, la cosa parece sencilla, luego leyendo el paso-a-paso ufffffff tendré montones de limones dentro de poco (pratico el km0) pero lo mas difficil sera encontrar aguardiente de Orujo del bueno, es el preferido del Señor LaFrancesa y lo esta buscando por todas partes desde 4 años : despues de la primera vez que lo comprobamos.
ResponderEliminarGracias por tu comentario en mi blog ;-)
Las tiendas on line pueden ser una solución para conseguir un buen aguardiente de orujo de Galicia, ya que las bodegas cada vez ofrecen en mayor medida esta opción: Aguardientes de Galicia, Pazo de Señoráns, o Habelas Hailas Licores tienen tienda donde podrás adquirir este producto tan característico de Galicia
EliminarMagnífico estreno con este limoncello
ResponderEliminarHola Francesa, pues vaya, no sabía que era tan complicado encontrar el orujo... Claro, aquí en Galicia le das una patada a una piedra y lo encuentras, como quien dice... La receta original decía alcohol, y yo elegí el aguardiente de orujo porque es lo que más abunda en mi tierra...
ResponderEliminarHola Carmelo! Pues me alegra que te guste!!
ResponderEliminarTiene un color de lujo que ganas de una copita.
ResponderEliminarBuono il limoncello...lo copio così poi lo provo.
ResponderEliminarUn orujo muy rico.......!mira que hay orujos!...pues de limón no lo he probado, tendré que hacerlo......!me quedo por aqui!, tienes cosas muy interesantes, besitos
ResponderEliminarHola cocinero químico: mi nombre es Belén y acabo de descubrir tu blog en otro blog de cocina, a partir de hoy tienes una nueva fans (creo que se escribe así) es decir una autentica seguidora de tu blog, ya que me encanta entender los procesos químicos y físicos en la cocina.
ResponderEliminarMe compre un libro que se titula "la física en la cocina" de lo más curioso y te enseña trucos para cocer por ejm. los huevos sin que se rompan etc.... y ahora ya he encontrado la química junto con un cocinero, más no puedo pedir,hasta pronto por cierto yo también conocía lo del alcohol puro para la receta y no me atrevía a prepararla por un poco de miedo al alcohol en esa concentración. Lo prepararé y te comentaré que la rapidez de desaparición del producto elaborado, ya que es directamente proporcional al sabor.
SIN PALABRAS ME HE QUEDADO...ME LLEVO LA RECETA, DOS CHUPITOS Y TE MANDO MIL APLAUSOS Y UN BESO.
ResponderEliminarCreo que viendo esta maravilla, me voy a atrever a hacer este licor, tengo los limones ideales, recien cogidos del árbol, te contaré el resultado.
ResponderEliminarLolines: Pues si tienes limones recién cogidos del árbol, te puede salir de vicio. Un aguardiente bueno y un agua mineral que no dé sabor, y listo!
ResponderEliminarHola Carolina! Qué comentario tan cariñoso!! Muchas gracias, pásate por aquí a menudo, que me da subidón de ánimo!!!
ResponderEliminarHola Belén, me alegro de que te guste el enfoque del blog!! Pues yo también soy seguidora de libros como el que comentas, aunque ese en concreto no lo conozco. Espero verte a menudo por aquí!!
ResponderEliminarBienvenida Silvia! una gallega por Granada, qué bien!! Pues me alegro mucho de que te quedes por aquí, besiños!!
ResponderEliminarEhm, ehm ... Mi sento un po 'audace per fare un liquore tipico italiano, e avere un lettore italiano ... Saluti!
ResponderEliminarHola Trini! sí, el color es muy lindo, y el sabor no desmerece nada. Yo tengo una botellita en la nevera!!!
ResponderEliminarDieser Schnaps tiene pinta cojonuda!!! Como buen austrríaco normalmente no valoro los licores de nuestros vecinos del Sur, me parecen demasiado flojos (donde estén nuestros Digestiven!!)
ResponderEliminarAún así, la receta me parrece magnífica, y creo que lo probaré. Aceptaría encantado cualquiera de propuestas de Rohito, y sin dudar, Sacher Torte es buena elección, pero esta vez reconozco que bica blanca del triángulo mágico aus Galicien es perfecta y creo que Químico Cocinero ha acertado. Así que yo también elijo bica blanca!! Gut gemacht!
Herr, veo que coincidimos! Pues a Rohito no le va a quedar otra que manifestarse en forma de bica blanca de Laza!!!!
ResponderEliminarPues anda que no me gusta a mí ni ná el limoncello de marras!!!! y no me imaginaba yo que fuera tan sencillo de hacer! así que.... con tu permiso te copioteo la fórmula por que ya te digo que me encanta! y aquí otra cosa no, pero orujo tengo pa dar y tomar!!!! gracias por compartir esta preparación!!! te ha quedado con un colorcillo fantástico!!!
ResponderEliminarUn abrazo salsero, Químico!
Tito! :)
Habra que darle un trago no? jejeje.
ResponderEliminarTantos años, y es la primera vez que te veo con una botella, que más parece de perfume, que de licor.
ResponderEliminarMy típico tuyo algo relacionado con la huerta. Te imagino en Ourense, recogiendo los limones de la huerta, y con el orujo recién traido de Cambados, preparando, en ese laboratorio de química organica el brevaje, en el caldero, encima de la lareira, porque quieras que no lo de químico, y lo de meiga van muy unidos, o no?
por cierto yo voy a sugerir para acompañar un delicioso lemon pie, que me enseñó a preparar una amiga americana, te apetece?
Quimicocinerillo!!!..ya estoy aquí!!...que se creía mi socio que se iba a quedar con la formula magistral para el solito jajajaaa!!!...ahora también es miiiiiia!!!!
ResponderEliminarademás tengo un montón de limoneros en el jardín..así que ya sabes que haré cuando los limones tengan la piel gordita no??? ;))))) litros y litros de limoncelo para una mega fiesta!!! ;)
encantada de conocerte quimicocinerillo!!!!!! y besitos!
Tito: Pues claro, para eso la cuelgo, además con orujo gallego DO!!
ResponderEliminarJuana: mujer, no pienses mal, seguro que quería sorprenderte!! Tú pones los limones caseros, él el orujo gallego, y os puede quedar de impresión!!
Hola Libertad: pues como no me gustan los licores que se pasan de dulces, le quité un poco de azúcar (si comparo con la receta original). Para hacer un brindis cuando te llegue ese regalo tan especial que esperas!!!
ResponderEliminarPues nada, nada, bica de Laza entonces, aunque viendo la sugerencia de Sopa Boba, lo ideal sería un postre degustación: lemon pie, bica blanca y limoncello. ¡Y larga vida a las bebidas espirituosas!
ResponderEliminarSopa Boba: efectivamente lo de química y meiga en mí viene junto!!!Y al Lemon pie, de cabeza! que ya sabes que todo lo cítrico me pierde:) Por cierto, el orujo también era de Ourense...
ResponderEliminarRohito: pues habrá que montar una degustación con Sopa Boba en diciembre. Espero que el limoncello llegue a esas :))
ResponderEliminar¿Temes acaso, Químico, que por un efecto físico de evaporación el limoncello se desvanezca sin dejar huella...? Yo creo que dejando las botellas "bien cerraditas" no debería haber problemas de escasez. Una degustación en diciembre suena muy bien. Me apunto.
ResponderEliminarEjem, Rohito... no estaba pensando en un proceso de evaporación... no sigamos que se me suben los colores...
ResponderEliminarQue maravilla de licor, un beso.
ResponderEliminarvaya colorcito !!!madrem ia nada que envidiar al comprado !!!
ResponderEliminarBESOTES (LA COCINA DE LAS PINUINAS)
Por cierto como al superior jerárquico no le gustan mucho los citricos, yo puedo llevar pacharan y una tarta de almendra made in SP
ResponderEliminarDivino tu blog. Y este limoncello se ve de maravillas. Tremendas fotos.
ResponderEliminarTe invito a visitarme por mi cocina.
Un abrazo,
Vero
Hola Vero: pues gracias, aunque aún me tengo que currar bastante la estética (está a monte como yo digo), pero ahí es donde no me decido! Menos mal que tengo a Dospixels con sus fotografías para entonarlo!!
ResponderEliminarHola Sopa Boba: pues claro, cuanto más variado mejor. Creo que no pillo bien lo del superior jerárquico... (empieza por A???)
ResponderEliminarHola Marta y Cris: pues queréis ver que nunca tomé Limoncello comercial??? tendré que conseguir la botella, para poder comparar con algo:)
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarA... es Superior Jerarquico, término muy utilizado en derecho que acoj....mucho y que después de barajar nombres que proponía en idem, le ha quedado por prescripción facultativa.
ResponderEliminarMe encanta el limoncello, Químico! Qué buena presentación en esas botellas tan bonitas. Saludos!
ResponderEliminarChallenge accepted! Nos ofrecemos a preparar algo rico de postre para acompañar :¬)
ResponderEliminarDieta de Panda: Bienvenido:) A ver qué postres proponéis, por ahora proponen bica blanca de Laza y Lemon Pie!
ResponderEliminarHola Angie! Muchas gracias:) Las fotos son mérito de mi socio Dospixels, le pasaré el recado:):)
ResponderEliminarHola Sopa Boba: tomo nota, SJ le quedó:)
ResponderEliminarPor fin lo he probado este fin de semana, en repetidas ocasiones,ejem, estrenándome así como catadora y me ha gustado mucho (el licor y ser catadora). A su precioso color se une un sabor muy suave que recoge la esencia del limón, pero también de lo fresco, del aire libre y del sol. Hasta apetece ponerse unas gotitas detrás de las orejas...
ResponderEliminarBien, Rohito! veo que te has tomado la cata con seriedad y no te has precipitado a juzgar tras una primera impresión!!!
ResponderEliminarQue pasada¡¡
ResponderEliminarfantástico,
que belleza de fotos...
Fantástico. Preciosas fotos.
ResponderEliminarMe gusta tu blogs y me encantaria que lo compartieras con el mio,que es
ResponderEliminarhttp://miscosascotidianascristina.blogspot.com.
Besos desde Sevilla
Esta me la apunto, en cuanto tenga tiempo la hago¡¡¡ Que buena¡
ResponderEliminarHola quiero saber si cambio el aguardient por uno que tenga anís me es difícil conseguir el q ud utilizo grax
ResponderEliminarMefascinan las explicaciones
ResponderEliminarExcelente blog me fascinan las explicaciones gracias
ResponderEliminarMefascinan las explicaciones
ResponderEliminarEstupendo. Lo suelo hacer igual añadiendo una ramita de canela y sin agua. Me imagino que con agua será mas suave.
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